
Vida diaria: estar en paz y vivir de mi poesía
Estos últimos meses me he dado cuenta de algo muy importante: dejé de mover Espejismos, ya no continué escribiendo en el blog y abandoné por completo mis redes sociales. ¿Por qué? Porque comencé a reprimirme artísticamente de manera importante, no porque no quisiera, sino porque las circunstancias de la vida diaria ajenas a mi pasión comenzaron a interferir en mi crecimiento como escritora.
Al salir del trabajo llegaba a casa sin querer hacer nada, sin el deseo o motivación de escribir; sin ese cosquilleo de anotar alguna idea en mis tantas libretas o producir un poema con el sentimiento que me caracteriza. Empecé a sentirme apagada, sin valor y sin esa pasión que siempre le pongo a las letras al momento de escribir y la verdad es que se siente horrible, la represión artística y creativa es terrible.
Hasta dejé de leer
Y sí, suena espantoso. Por dos meses estuve buscando un libro que me llenara, que me entregara y me devolviera la pasión por la lectura y me inspirara a escribir, pero no encontré ninguno. Terminé unos cuantos y hasta ya completé mi reto de leer 30 libros este año lo cual estoy orgullosa, pero ¿leer por leer? Mi bloqueo literario, creativo y como escritora estos dos meses fueron muy pesados y me llegaron a deprimir más de lo normal.
Las razones las conozco bien y se podrían reducir a:
- Amor no correspondido
- Problemas en el trabajo
- Alejarme del hombre al que amaba
- Problemas en el trabajo
- Llorar todos los días
- Enfermedades, medicinas y hospitales
- Estrés, mucho estrés, ansiedad y depresión
- Toxicidad en el trabajo
- Personas que poco a poco empezaron a robarme pedazos de mi alma y bloquearon mi creatividad, pasión y amor por el arte, por escribir, hasta por leer.
- Extrañar al hombre que más he amado en la vida y por supuesto
- Problemas en el trabajo
Creo que al final no fue un resumen…
El punto es que después de estar perdida de esta forma y de manera artística, estuve pensando mucho en lo que deseaba hacer y en lo que quería lograr a continuación y el resultado fue algo que ya sabía, pero que me ha costado trabajo lograr y encontrar: lo único que deseo es sentir paz, explotar mi arte y vivir de mi poesía, mis cuentos, mis libros y posteriormente, de mis novelas.
Quiero vivir de mi arte
En otras palabras, lo que más deseo es viajar y vivir de mi arte.
Conocer lugares nuevos, visitar Japón una vez más porque lo extraño mucho; explorar y aventurarme por países y lugares mágicos que me llenen el alma, que me inspiren y me ayuden a crecer como escritora, como poeta y como artista.
Quiero recorrer el planeta Tierra, descubrir sus secretos y documentarlos en papel…pero no es un sueño fácil de cumplir, aunque no imposible.
Hace tres años, después de un golpe muy duro aprendí que la vida es precisamente eso: aventurarte y hacer todo lo que te dé la gana. Si sale bien, que bueno, y si sale mal, se aprende de ello para volverlo a intentar tal vez de una forma diferente o perseguir otro sueño.
A veces me acuerdo de las palabras de Rapunzel en la película de Enredados cuando tiene miedo de ver las luces en el cielo porque no sabe qué otro sueño perseguir. Pero eso es lo bonito de la vida y sobretodo, de vivirla, y si las cosas no salen bien, seguir intentando de otra manera lo que amamos hacer.
Vida tenemos una
De todas formas, vida sólo tenemos una, y es esta, porque las que viviremos después no cuentan, y no tengo pensado quedarme sentada esperando a que esas aventuras lleguen por sí solas, porque eso nunca va a pasar, soy yo quien debe abrir la puerta y salir a lo desconocido, con mucho miedo, sí, pero con la firme convicción de que estoy haciendo lo que amo hacer y que nadie ni nada me va a detener.
Tal vez no sea sencillo y puede que tenga momentos complicados durante ese proceso, pero al final sé que lograré hacer lo que más deseo en este mundo y que lo he repetido hasta el cansancio ¡Vivir de mis libros!
Y es por eso que se acerca un proyecto grande, hermoso y lleno de aventura que no dejaré pasar. Llegarán muchos libros, muchas historias, arte, escritos, poesía, viajes y sobre todo, mucha pasión, experiencias y vida, mucha vida.
Estoy esperando el momento con ansias.

