Luz brillante
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Recomendación literaria: Luz brillante de Kaori Ekuni

Existen muchas historias de triángulos amorosos o de matrimonios concretados que al final salen a la perfección. Pero, existe una historia que combina estos dos temas y se llama Luz brillante de la autora japonesa Kaori Ekuni. En este libro, el único traducido al español, conocemos la vida de Mutsuki y su esposa Shoko. ¿Qué lo hizo tan fascinante? Que el es gay y ella una alcohólica.

Luz brillante de Kaori Ekuni

 Luz brillante

Llevan poco tiempo de casados. Los dos se conocieron mediante una cita a ciegas; o como es más famoso en Japón, un matrimonio concretado. Ella sabe el secreto del Mutsuki, un hombre de treinta años que tiene una pareja estable llamada Kon. Su relación es homosexual y los dos se aman con pasión. Debido a esto, la pareja no mantiene relaciones sexuales, pero a Shoko no le importa. Ella ama a Mutsuki y se le hace el hombre más encantador del planeta. Está feliz con su matrimonio y con las historias que él le cuenta sobre Kon.

Por otro lado, ella es alcohólica y un poco loca. A veces habla con las plantas o con un cuadro que tienen en su casa. Ella está a gusto con su matrimonio y no le importa que su marido sea gay; al contrario, siempre quiere saber más sobre la pareja de éste y hasta ansía conocerlo. Cuando llegan a juntarse los tres, una especia de triángulo amoroso aparece porque ella ama a los dos y quiere estar con los dos aunque no sea de manera sexual, sino espiritual.

Los problemas de agravan cuando la familia de ella, quienes no conocen el secreto detrás de Mutsuki, empiezan a decirle que tenga un hijo. También, las cosas de balancean cuando Mustuki intenta que su esposa se consiga un novio para que la toque o le dé aquello que él no puede darle. Shoko es feliz con la pareja homosexual, se siente en familia y no quiere la presión de nadie; por eso, decide confesarle a sus padres y amistades, la relación que mantiene con su marido y con la pareja de éste. Una amistad y amor incondicional que no se encuentra en cualquier persona.

Un trío y amor incondicional

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Esa es la relación que mantienen los tres personajes. Shoko no necesita sexo para estar feliz con su marido y acepta abiertamente que él tenga una pareja gay. Ella también quiere mucho a Kon y no desea buscar una pareja sexual ni nada por el estilo. Ella lo tiene todo: el amor en su máxima expresión.

La historia tiene muchos giros, pero la delicadeza de Ekuni para narrar las situaciones es meramente dulce y cariñosa. Logras ver el amor que se tiene el matrimonio; la manera en que tuvieron que disfrazar la homosexualidad de él y el cómo Shoko hace que Kon se vuelva parte de la familia.

“Habíamos sido amigos durante mucho tiempo y yo empezaba a sufrir. Habíamos llegado a un punto a partir del cual no sabíamos cómo continuar. El inmenso firmamento que había pintado transmitía una serenidad y paz absolutas. Así que aquella noche algo nuevo empezó entre nosotros.”

Un amor de tres sería imposible de pensar y puede que hasta sea extraño pensar en vivir sin caricias o besos apasionados entre dos personas; pero el amor tiene muchas maneras de ser mostradas y Mutsuki es la representación de ello. Él ama a su esposa sin apegos, de forma incondicional; sin reclamos y de manera pura, bella y leal; así como su esposa hacia él. También, Mutsuki ama a Kon, pero de una manera distinta, ese amor de las almas gemelas, de ser uno con el otro; un amor pasional. Podría decirse que Mutsuki tiene el amor, en toda su maravillosa existencia, en dos personas.

Con Shoko es igual, ella ama a los dos hombres, pero no siente atracción sexual; sólo mucho cariño y amor eterno que nadie, salvo ella y los otros dos hombres, lograrías comprender.

Los estereotipos de la sociedad

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Así lo pide el sistema: cásate y ten hijos. Pero esta familia está fuera de cumplir con ellos y sobre todo, de amar sin tener miedo ni que les importe lo que la gente pueda pensar de ellos. Tienen problemas con sus familias, con sos amigos; incluso con una ex pareja de Shoko. Pero son problemas que logran sobrellevar debido al amor que se tienen ambos personajes y que expresan con sus actos, en el día a día y con la aceptación de quienes son y de que no les importa lo que la sociedad dicta; sino lo que su corazón siente.

Cada capítulo del libro está narrado por Shoko o por Mutsuki. Gracias a esos cambios de narrador podemos conocer cómo se sienten al respecto, sus dudas, tristezas y miedos; pero también el cariño que brindan, la confianza que se tienen y el amor que existe sin demandar más, sin esperar, sin exigir. Es un sentimiento puro, algo que los personajes no logran comprender y que el propio lector, mientras más se adentra en la lectura, logra entender y aceptar. ¿Cuántos de nosotros tenemos un amigo o una persona que amamos incondicionalmente, de una manera pura y sin sentir más allá que el puro amor? Shoko lo tiene con su marido y Mutsuki con su esposa. Él ama a Kon con toda su alma, pero también ama, con todo su ser, a Shoko. Igualmente sucede con ella.

“¿Casarte con él? Para ti será como abrazar el agua.”

Cuando ambos logran comprender eso, lo demás no es importante. La felicidad de ambos, aunque exista un tercero es infinita; ya que Kon no es un estorbo, no es un motivo de enojo; no es alguien que demande el amor del otro. Kon es parte de la familia, es parte de ese amor que existe entre los tres; alguien que hace que el cariño sea más grande y que los lazos de confianza, lealtad, respeto y amor sean cada vez más grandes.

Un amor brillante

 Luz brillante

Luz brillante es una novela que puede no gustar a muchos, pero a mí me emocionó muchísimo debido a la carga emocional que contiene cada una de sus líneas. Me hizo pensar en las relaciones personales que tengo y la forma en que les brindo mi amor y viceversa.

Por otro lado, como toda literatura japonesa, la historia está narrada de manera dulce y tranquila. Los problemas pasan suaves y con el ritmo de las estaciones o del movimiento de los árboles. Es un libro cargado de muchas emociones, amor y aceptación hacia la otra persona. Un amor que no juzga, que es feliz y que aprecia la compañía del otro simplemente porque está ahí, a su lado, sin tener que pedirle nada más. Un cariño que no demanda, que no traiciona y que es leal. Algo así es muy difícil de encontrar.

Reconozco que no conocía a la autora y, como ya mencioné, es la única novela de ella traducida al español. De verdad, vale muchísimo la pena. No sólo porque es una novela que expresa al cien por ciento la realidad de la homosexualidad, la sociedad y el matrimonio; tampoco porque describe el amor como el sentimiento más puro; sino porque es una buena historia, para empezar por el camino de lo que la literatura japonesa tiene que ofrecer.

Es una novela que me dejó con una luz brillante en el corazón.

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