
Recomendación literaria: Hanakotoba de Alex Pler
Últimamente se ha vuelto popular buscar palabras en otro idioma —o del español— que signifiquen algo sumamente extraordinario. Por ejemplo: petricor, que es el olor de la lluvia, a tierra mojada; ese delicioso aroma cuando termina de llover —o antes y durante—. Otro ejemplo es laotong, del chino, que significa una amistad entre mujeres tan profunda como si fuera tu alama gemela. Tiene un significado más profundo, pero esa es la idea principal.
El punto de estos ejemplos es que el japonés tiene muchas palabras de este estilo, palabras que expresan mucho en tan poco. Palabras que dicen todo un contexto en el que nosotros le damos vueltas y vueltas y que los japoneses resumieron para darle sentido a todo ese embrollo de ideas. Y no sólo eso, también para expresar cosas propias de emociones o de la naturaleza. Y muchas de esas palabras están recopiladas en:
Hanakotoba de Alex Pler
La editorial Satori sacó este compendio de palabras —muy pequeño para mi gusto—, pero que contiene más de cien palabras en un libro titulado Hanakotoba, el lenguaje de las flores y recopilado por Alex Pler. La introducción dice así:
Es extraño cuando descubrimos que una palabra en otro idioma expresa de manera escueta una imagen o una sensación para la que nosotros necesitamos muchas palabras. No se nos había ocurrido que pudiera existir un término exacto para ese concepto, pero otros sí lo pensaron en un idioma que no hablamos. Alguien se fijó en lo que nosotros preferimos pasar por alto.
El japonés tiene fama de ser un idioma ambiguo, y puede que sea cierto; pero también llega a ser muy preciso. Con este libro no pretendo recopilar palabras que se refieran a costumbres propias del la cultura japonesa y que, como son intraducibles, todos hemos adoptado (kimono, sushi, bonsái, geisha…); sino recoger palabras únicas que nos ilustran emociones, objetos y sucesos que todos hemos experimentado, pero que hasta ahora no sabíamos cómo llamar.
Quizá si conociéramos todos los idiomas, nos conoceríamos mejor a nosotros mismos y al mundo que nos rodea.
Con esta simple introducción, pero cargada de emotividad; nos adentramos a un libro que, si eres amante de la cultura japonesa, debes tener sí o sí. No sólo porque incrementará tu vocabulario de japonés; sino también porque conocerás más el cómo piensan los japoneses y la composición de su lenguaje. Además, es un libro cargado de emociones. Casi todas las palabras tienen que ver con asuntos del corazón, de nuestros pensamientos o de la naturaleza. ¿Cómo se llama ese sentimiento de nostalgia cuando vemos llover? Los japoneses tienen una palabra para ello. ¿Cómo se denomina a esa persona que compra libros y tiene muchos sin leer? Ellos tienen una palabra para identificarnos.
Un libro lleno de emociones
Cada una de las palabras que se muestran en el libro son sentimientos o sucesos que hemos experimentado en nuestra vida al menos una vez. Tal vez algunas sean propias de los japoneses, pero te identificarás con muchas de ellas y si eres de los que aman el idioma o el país; el libro te ayudará mucho a conocer más de las costumbres y del pensamiento interno de los japoneses.
Acompañado de fotografías que retratan el Japón que es presentado hacia el mundo, Hanakotoba es una recopilación que tienes que tener aunque no te guste el país. ¿Por qué? Si eres escritor, para ampliar tu vocabulario. Si eres lector, para conocer más palabras. Tal vez eres curioso, entonces tener una palabra que defina todo ese cúmulo de emociones es un gran pretexto. Si quieres ampliar tu léxico, aunque no hables japonés, estas palabras te ayudarán mucho. Pero sobre todo, si deseas ponerle un nombre a eso que sientes, este libro será una joya en tu biblioteca, un libro que abrirás una y otra vez.
El lenguaje de las flores
De las más de cien palabras, fueron más de la mitad las que me fascinaron y las que marqué con un pos-it para futuras lecturas. Les dejaré veinte de las que más me gustaron. Espero se lleguen a identificar con ellas o que les dé un significado a eso que siente, que han vivido y que no saben cómo expresar.
1) Fuyuzare: la desolación que nos provoca contemplar un paisaje invernal.
2)Ginko: paseo en busca de inspiración.
3)Hanafubuki: lLuvia de pétalos. Cuando una ráfaga de viento hace caer muchos pétalos a la vez.
4)Hirameki: golpe de inspiración.
5)Hitoritabi: un viaje que emprendemos a solas.
6)Ikigai: la razón de la vida.
7)Kachoofuugetsu: la belleza de todos los elementos de la naturaleza y la inspiración artística que nos brinda.
8)Koi no yokan: el presentimiento de que terminaremos enamorándonos de una persona que acabamos de conocer.
9)Komorebi: la luz del sol que se filtra a través de los árboles.
10)Kotodama: el alma de las palabras.
11)Sankan shion: la alternancia de días fríos y calurosos.
12)Seijaku: serenidad en medio del caos.
13)Shimijimi: la sensación de refugiarnos en nuestros propios pensamientos al sentirnos solos.
14)Shinra Bansho: todo lo que existe en el universo.
15)Shinrin-yoku: Una relajante caminata por el bosque.
16)Sooshun: los primeros días de primavera
17)Tsukimi: contemplar la luna llena
18)Zanka: las últimas flores que quedan en los árboles cuando todas las demás ya se han caído.
19)Hanakotoba: el lenguaje de las flores.
20)Hatsumimi: algo que escuchamos por primera vez.
Hanakotoba: el lenguaje de las flores es sin duda un libro precioso, lleno de sentimientos con los que te identificarás y sobre todo, con el que entenderás que en el mundo, todo aquellos que expresamos con muchas palabras; puede ser dicha en una.

